miércoles, junio 20, 2007

"CHEVALERIÉRE D'ÉON"
PARTE I.
Charles Genevieve Louis Auguste André Timothée de Beaumont- o D'Éon como se le conocía a su familia- nació en el seno de una familia de la petite noblesse de Tonnerre, Borgoña. A temprana edad participo en el servicio diploático de la embajada francesa en San Petesburgo. allí se enroló en el espionaje para tener bajo la lupa al embajador británico y para la influencia inglesa en Rusia. D'Éon cumplió su encargo con eficacia; pero cuando estalló la guerra de los Siete Años pidió ser enrolado en el ejercito donde se distinguió con valentía.
En 1762 comenzaron las platicas en Londres entre los gobiernos de Gran Bretaña y Francia para poner fin a la guerra. D'Éon era una de los miembros de la delegación francesa, y una vez más, se le asignó la misión de realizar una reunión secreta con los parlamentarios ingleses a fin de sobornarlos para que presionaran a que se firmara un tratado de paz.
Una vez terminada la guerra y retomadas las relaciones diplomáticas entre Gran Bretaña y Francia, a D'Éon se le nombro como primer secretario en la embajada francesa en Londres. El conde de Guerchy, embajador, no tenia buenas relaciones con D'Éon. El odio mutuo entre ambos obligó a D'Éon a abandonar la embajada y llevarse consigo importantes documentos . Entre ellos había cartas que revelaban nombres de parlamentarios y otras figuras influyentes inglesas que recibieron sobornos por parte del gobierno francés.
Guerchy exigió por todos los medios la devolución de dichos documentos, fracasando en su cometido. Por esa época comenzaba a circular un extraño rumor en Londres: que el chevalier D'Éon era una mujer que durante años se había hecho pasar por hombre. Indignado, D'Éon se negó y se burló de la sugerencia. Pero un año más tarde el rumor de que D'Éon era mujer fue la comidilla de todo Londres, y la gente comenzó a hacer apuestas. Se decía que la cantidad total que se había apostado respecto al sexo de D'Éon alcanzaba las 120,000 lbs. Los que creían que era un hombre se basaban en dos argumentos principales: su historial de valentía como oficial del ejército francés durante la guerra de los Siete Años, y el hecho de que era francmasón, porque era del dominio público que esa sociedad no admitía mujeres. Por otra parte, los que pensaban que era mujer señalaban que no se había casado y que no se le conocian amantes. Jamás iba tras mujeres, lo que era, por cierto, muy poco común para un oficial y caballero del siglo XVIII.
La única forma, y la más obvia, de comprobar si D'Éon era hombre o mujer, era pedirle que se sometiera a un examen medico; pero D'Éon, indignado, rechazó la sugerencia. Se le ofreció 25,000 lbs y, aún así se negó. De vez en cuando, alguien lo desafiaba públicamente a que demostrará que era hombre, pero D'Éon jamás respondía.
En 1777, un hombre que había apostado grandes sumas de dinero a que D'Éon era una mujer, y quería recuperarlo, presentó una demanda con el argumento de que podía demostrar que había ganado la apuesta. El hecho es que D'Éon se negó a subir al sitial de los testigos y al no aportar pruebas para su defensa parecía sugerir que temía que le pidieran someterse a un examen medico porque sabia que eso probaría al mundo haciéndole pensar que era un hombre cuando, en realidad, era una mujer. El veredicto del jurado fue que D'Éon era mujer y el juez proclamó ganador al demandante.
(FIN DE LA 1era. PARTE).

Etiquetas:

1 Comments:

Blogger Jesús said...

Que caso

21 junio, 2007  

Publicar un comentario

<< Home