DÍA COMÚN, UN DÍA EN LA VIDA.

La oficina móvil, el "trailer" como le llamamos, es un vagón con todas las características de una pequeña oficina pero es el más detestable y estresante de todos los puntos de venta que tenemos. Esta próximo a la entrada al fraccionamiento, a unos cuantos metros de la autopista Guadalajara-Manzanillo. El costante pasar de vehículos hace eco dentro de la cabina lo cual provoca que acabes con los nervios de punta. El día de ayer tube que cubrir esa guardia todo el día porque mi relevo se sintió mal y fue al medico para no regresar. A la salida, cansado y como polvorón, me dirigí hacia el centro de la ciudad para tomarme un buen café- "¡¡Estas loco!!¿Cómo que tomarte un café con este maldito calor?", me decía mi conciencia pero le hice caso omiso a la maldita que suele molestarme cuando más relajado me encuentro. Pues si, dicen que el día de ayer el termómetro subió a los 35ºC y yo, ahí en el café San Remo tomándome mi taza de café con un vaso de agua con hielitos. Y el mundo rodó y mis pasos me llevaron a una librería. En aquellos ayeres, siempre reconocía a los autores y a las editoriales en cambio, ahora ya no logro distinguir una de otra con tantas fusiones entre casas editoriales de la aldea global y que decir de los autores, mejor me voy a lo seguro, a lo que conozco ya habrá tiempo de descubrir nuevos talentos. Me he salido en blanco de la librería pues he prometido no comprarme ningún libro hasta terminar de leer todo el anaquel pendiente en casa. A pesar de todo, no me quejo fue un buen día, un día en la vida.

¿Ven la imagen? A poco no les parece un tanto misterioso el señor del bombín? Es una pintura surealista de Rene Magritte y se llama "El Hijo del Hombre".