lunes, abril 17, 2006

El Tio Serapio.
Toda la noche me la pase sin dormir. ¿Demasiado calor o demasiadas preocupaciones? Tal vez fueron ambas, no lo se. Ya ven que de tantas vueltas a uno le da por pensar y pensar, analisar o recordar cosas que ya se suponen olvidadas. Recorde al tio Serapio, no se por que razón. Cuando le conocí creo que yo tenia cinco o seis años. En cuanto le veía llegar a la casa me escondia debajo de la cama, pues con su aspecto a quien no: tenia el rostro desfigurado, usaba lentes oscuros pues solo tenia un ojo, moreno y corpulento caminaba renco con ayuda de una mulita de caña. Era primo de mi abuela materna e iba a la casa del rancho con mi mamá solo de pasada para descansar mientras pasaba su camion para su rancho. Su aspecto fisico me daba miedo. Años despues mi madre me platico el porque de su desfiguracion. Serapio era dueño de una pequeña parcela de tierra que habia heredado de sus padres. El cacique de aquellos lares, don Juan Mier le ofrecio comprarlas por una cifra muy baja, mi tio Serapio no aceptó. Don Juan enfureció y le amenazó. Un día de madrugada, antes de la faena, Don Juan y sus dos hermanos esperaron en la oscuridad a Serapio. Cuando le vieron bajar la cuesta, se le echaron encima con machetes en mano. Serapio cayó al suelo y pretendiendo cubrirse con su mano izquierda, le cortaron los dedos pulgar, indice y medio. Una vez en el suelo un machete le cortó en diagonal la cara como resultado perdio su ojo derecho y le soltó la quijada. En un charco de sangre y lodo, Don Juan y sus hermanos Sebastian y Julian, le dejaron ahi tirado creyendole muerto. No me pregunten como se entero la Tia Liboria de que algo malo le habia pasado a Serapio ( mi abuela argumentaba un sexto sentido). Serapio y Liboria desaparecieron del rancho y por algun tiempo no se supo más de ellos.
Corrian los años cuarenta y el clima calido era optimo para el cultivo del tabaco, mismo que el consorcio ingles de tabaco de la reina pagaba a buen precio y la tierra de los Mier era prospera. Ya casi nadie se acordaba de Serapio y Liboria, cuando de pronto Julian el más chico de los Mier, murio envenenado por alguna posima del los pantanos. Don Juan y Sebastian guardaron silencio. Todavia no se cumplia el año luctuoso de Julian cuando Sebastian fue asesinado con una escopeta en su finca. Don Juan ya entrado en años, entro en panico y contrato a tres asesinos a sueldo para que buscaran a Serapio. Duraron dos años sin encontrar rastro alguno hasta que los sicarios sin sueldo que cobrar dejaron de buscarle. A los tres años del asesinato de Sebastian, don Juan Mier fue brutalmente asesinado a machetazos: fue dificil reconocer su desfigurado rostro, solo por las incrustaciones en oro de su dentadura. Nadie dudo en la venganza de Serapio, era un secreto a voces, pues al tiempo regreso de su exilio en la sierra donde se habia refugiado mientras se calmaba la situación. Mi abuela y mi mamá decian que entre Serapio y sus dos hijos habian matado a los Mier. Ellos nunca confesaron su crimen y nadie los obligo a rendir cuentas, ni siquiera la ley. Cuando yo le conoci, el tio Serapio era toda una leyenda en el rancho, aún asi no dejaba de darme miedo.